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El hábito recomendado por los expertos en salud para reducir el riesgo de cáncer de colon: solo cambie esto en su alimentación
Se recomienda aumentar el consumo de fibra, ya que una dieta rica en este nutriente ayuda a reducir el riesgo de desarrollar esta enfermedad.
Una dieta con mayor cantidad de fibra podría ser clave para reducir el riesgo de cáncer de colon, un tipo de cáncer que ha comenzado a afectar a personas cada vez más jóvenes. Aunque esta recomendación médica no es nueva, su relevancia cobra fuerza debido al bajo consumo de fibra en la población y al crecimiento de casos entre menores de 50 años.
En este contexto, se populariza una nueva forma de comer sano: las ensaladas de frijoles. A diferencia de las versiones tradicionales, estas ensaladas tienen como base las legumbres, un grupo de alimentos altamente ricos en fibra. Este cambio sencillo, pero poderoso, ha captado la atención en redes sociales por su valor nutricional.
Según los especialistas, el consumo promedio de fibra en adultos está muy por debajo de lo que se necesita para mantener una buena salud intestinal.
“La fibra es una parte realmente crítica de nuestra dieta general, y solo se consume entre el 5 y el 10 % de la cantidad recomendada”, dijo al medio HuffPost el Dr. Ron Quinton, director médico del Goldring Center for Culinary Medicine en la Universidad de Tulane.
Las recomendaciones nutricionales sugieren que las mujeres deberían consumir unos 25 gramos de fibra diarios, mientras que los hombres deberían llegar a los 38 gramos. Sin embargo, en la práctica, la mayoría de las personas apenas alcanza los 10 gramos por día.
Una mayor ingesta de fibra no solo contribuye a mejorar el tránsito intestinal. Según explicó el Dr. Quinton, “la fibra juega un papel importante en la salud del colon, y cuando el colon se vuelve poco saludable, estamos expuestos al desarrollo de cáncer y otras enfermedades inflamatorias”.
La fibra también reduce el tiempo que los desechos pasan en el colon, lo que disminuye la posibilidad de estreñimiento y la exposición a sustancias tóxicas. “Si hay toxinas en las heces que pueden causar cáncer, al pasar menos tiempo en el colon, se reduce la exposición a estas sustancias”, añadió.
Los beneficios de una dieta rica en fibra no terminan ahí. Este componente alimenticio también favorece al microbioma intestinal, ese ecosistema de bacterias que habita en el sistema digestivo. “La fibra suele ser prebiótica, lo que significa que sirve de alimento para las bacterias probióticas”, explicó Mary Ellen Camire, profesora de ciencia de los alimentos y nutrición humana en la Universidad de Maine.
Cuando estas bacterias digieren la fibra, producen compuestos que protegen la salud del colon. Además, las células que recubren esta parte del intestino, conocidas como colonocitos, también se ven beneficiadas. “Cuando esas células están sanas, forman una barrera que impide que sustancias dañinas pasen al resto del cuerpo”, agregó Quinton.
Qué alimentos ayudan a subir el consumo de fibra
está en hacerlo de manera gradual, ya que cambios bruscos pueden generar malestar. “Si estás acostumbrado a comer 15 gramos de fibra y de repente subes a 30, las bacterias van a hacer fiesta y podrías tener gases o cólicos”, advirtió Camire.
Entre los alimentos más recomendados se encuentran:
La fibra es de gran beneficio para la salud. Foto:iStock
Semillas: chía (10 g en dos cucharadas), lino, girasol.
Legumbres: lentejas (18 g por taza), frijoles negros (15 g por lata), garbanzos, habas, guisantes.
Frutas con cáscara: peras (6 g por unidad), frambuesas (8 g por taza), manzanas, bananos, naranjas.
Verduras y hortalizas: brócoli, espinacas, alcachofas, zanahorias, coles de Bruselas, patatas con piel.
Cereales integrales: avena, arroz integral, quinoa, pan integral, pasta integral, cebada (6 g por taza).
Frutos secos: almendras, nueces, pistachos.
Palomitas de maíz: preferiblemente hechas al aire, sin grasas añadidas.
Camire sugiere preparar platos como ensaladas con frijoles o con pasta integral, además de aprovechar las frutas y verduras de temporada para aumentar la ingesta diaria de fibra.
¿Y los suplementos? No son la mejor solución
Aunque en el mercado existen productos diseñados para complementar la dieta, los expertos son claros al respecto: no reemplazan a los alimentos naturales. “Ninguno de los suplementos es un reemplazo adecuado para la fibra natural”, aseguró Quinton. “No creo que puedas simplemente reemplazar la fibra con suplementos. Tienes que comer alimentos integrales”, insistió.
Por último, se recomienda prestar atención a señales como dolor abdominal persistente, presencia de sangre en las heces o cambios en el ritmo intestinal. Consultar al médico es esencial, especialmente si existen antecedentes familiares de cáncer de colon.
*Este contenido fue hecho con la asistencia de una inteligencia artificial, basado en la información de El Comercio (GDA), y contó con la revisión de la periodista y un editor.