'Hay que estar alertas': advertencia del alcalde de Pasto, tras la frustración de dos atentados terroristas

Los organismos de seguridad en la ciudad de Pasto se encuentran en máxima alerta, después del hallazgo de una motocicleta con un potente artefacto explosivo compuesto con cuatro kilos de pentolita.

Al cabo de pocos minutos llegaron al lugar efectivos antiexplosivos de la Policía Metropolitana, quienes lograron establecer que la motocicleta estaba cargada con un artefacto explosivo.

El hallazgo de la moto y el explosivo se produjo muy cerca de las instalaciones del Colegio Pedagógico, donde se educan alrededor de 500 estudiantes.

El alcalde de Pasto, Nicolás Toro, al concluir en la mañana de este jueves un consejo extraordinario de seguridad, lamentó que este hecho haya registrado, pero a la vez reconoció la oportuna información de ciudadanía y la rápida reacción de la Policía Nacional.

“Es lamentable que la maldita violencia que está azotando a todo el país llegue a nuestra ciudad”, señaló el funcionario, y luego dijo: “La noche anterior nos dejaron una moto cargada con altos explosivos que pudieron haber causado un gran desastre y aún más cuando muy cerca hay un colegio, eso nos parece demencial”.

Precisó que ante este hecho se van a tomar medidas muy drásticas en materia de seguridad.

“No vamos a permitir que los delincuentes vengan aquí a golpearnos, vamos a actuar rápidamente, vamos a militarizar la ciudad a través del Ejército, ya nos han ofrecido este trabajo y la Policía Nacional va a estar muy atenta a cualquier actuación anormal”, agregó.

“Hay dos hipótesis que sería de los grupos que les gusta actuar de esta manera tanto en Nariño como a nivel nacional, pero con los organismos de seguridad nos hemos propuesto incrementar las recompensas, para quien suministre información de los responsables de actos terroristas”, declaró.

“Solicitamos a la comunidad que nos informe, si observa un vehículo, una moto o una persona sospechosa, que inmediatamente nos informe para poder actuar”, dijo.

De otra parte, en una operación conjunta, las tropas del Ejército Nacional lograron ubicar varios artefactos explosivos improvisados que habían sido instalados a tan solo 10 metros de distancia de varias viviendas, en el municipio de Santa Bárbara de Iscuandé, Costa Pacífica de Nariño.

“Gracias a una oportuna alerta de inteligencia táctica, se detectó el sistema de activación del artefacto, el cual estaba preparado para ser detonado a distancia mediante cableado eléctrico”, informó el Ejército.

Durante la operación el Grupo de Explosivos y Demoliciones realizó la destrucción controlada del explosivo, compuesto por 2 cilindros de 40 libras con explosivos, una botella de 500 ml cargada con pentolita adaptada como bomba, 2 baterías de automóvil utilizadas como fuente de energía, 200 metros de cable dúplex y 2 medios de lanzamiento artesanal. Todo el sistema estaba diseñado para detonar con un alto poder destructivo.

“Gracias a esta intervención oportuna, se evitó una tragedia que pudo haber cobrado la vida de militares y civiles, y se asestó un golpe directo a la capacidad armada y terrorista de dicha estructura residual”, recalcó el Ejército.