el colombiano Jonathan Montoya Rendón, quien figuraba en la lista de 'los más buscados' por las autoridades de España, se entregó a la Policía. Su rostro había sido difundido por los investigadores en las últimas semanas para dar con su ubicación.
A partir del informe Policía Nacional de España, al agotarse "todas las líneas de investigación", se decidió incluirlo en la lista de los 10 fugitivos más buscados en ese país.
La autoridad aseguró este 17 de julio que la "presión tras la publicación de la campaña" le forzó a presentarse.
"La campaña, difundida por todos los medios de comunicación y por las redes sociales de la Policía Nacional con 4.000.000 de visualizaciones, motivó que el fugitivo, sometido por la presión mediática, ara con las autoridades policiales con el fin de entregarse", señaló.
Jonathan Montoya Rendón. Foto:Policía de España
Montoya Rendón acudió a las dependencias del Complejo Policial de Canillas y allí fue detenido por agentes de la Policía Nacional y la Policía Municipal de Madrid.
El crimen y la condena por la que buscaban a colombiano en España
El colombiano tiene una condena por participar en 2009 del asesinato en España del capo Leónidas Vargas, uno de los socios de Pablo Escobar.
Vargas había recibido una sentencia en Colombia por delitos de narcotráfico, homicidio, porte ilegal de armas y enriquecimiento ilícito. Sin embargo, se había ido a Europa, donde trató de pasar desapercibido.
Aunque al capo lo habían detenido, estaba en una libertad condicional a la espera de juicio cuando debió ingresar al Hospital 12 de octubre de Madrid por una afección pulmonar.
Fue en la habitación 543 de la institución médica hasta donde llegaron hombres para asesinarlo. Entre ellos estaba Montoya Rendón.
"Por encargo, acabaron con la vida del responsable del cartel colombiano de Caquetá y socio de un conocido capo colombiano. El asesinado, ingresado por una afección pulmonar, recibió cuatro disparos realizados con una pistola con silenciador", indicó la Policía Nacional.
Montoya Rendón fue sentenciado a 24 años de cárcel por los delitos de asesinato y de tenencia ilícita de armas. No obstante, se fugó de la prisión en septiembre de 2023 tras pedir un permiso.
En las últimas semanas de julio de 2024, autoridades emprendieron una cruzada para ubicarlo. Fuentes próximas a la investigación señalaron a EFE que a raíz de ello, fue reconocido por su empleador y por su casero, aunque ninguno de los dos alertó a la Policía.
Volverá a estar tras las rejas y se espera que pueda ser juzgado ahora por darse a la fuga.
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